Comenzaremos despuntando el calabacín, lavándolo, y rallándolo. Seguidamente, cortaremos los tomatitos cherry por la mitad, y pelaremos y cortaremos las cebollas en juliana. A continuación, calentaremos una cucharada de aceite de oliva en una sartén, y pocharemos la cebolla durante ocho minutos, removiendo periódicamente, y una vez lista la retiraremos de la sartén y la reservaremos.
Lo siguiente que haremos, será escurrir el queso de Burgos, y lo cortaremos en daditos, junto con el fiambre de pavo. Seguidamente, batiremos los huevos en un cuenco amplio, junto con la leche, el calabacín rallado, la cebolla pochada, los daditos de queso y pavo, y la albahaca lavada y picada. Lo salpimentaremos todo, y lo mezclaremos muy bien.
A continuación, forraremos con la masa quebrada un molde previamente engrasado, y lo pincharemos con un tenedor por varios sitios, para que no se nos hinche durante la cocción. Seguidamente, verteremos el preparado que teníamos en el cuenco, añadiremos los tomatitos cherry, y doblaremos los bordes de la masa hacia el interior del molde.
Lo siguiente que haremos, será hornear la tarta de queso, con el horno precalentado a 180° C, dejándolo que se nos haga durante cuarenta minutos aproximadamente, y una vez transcurrido ese tiempo ya podremos retirarlo, dejándolo reposar media hora para que se nos enfríe, antes de desmoldarlo, y presentarlo a la mesa.