Comenzaremos pelando y picando los ajos, y deshojando el tomillo. Seguidamente, salpimentaremos los filetes de pechuga de pollo, y los colocaremos en un cuenco amplio, junto con el ajo, las hojitas de tomillo, una cucharada de aceite de oliva, y el zumo del limón. Dejaremos así que repose el pollo en la nevera, durante dos hojas, para que coja todos los aromas y sabores.
Una vez transcurridas esas dos horas, limpiaremos las cebolletas, las cortaremos en rodajitas, y las saltearemos durante tres minutos en una sartén, con un poco de aceite de oliva. Cuando ya las tengamos listas, las escurriremos, y las reservaremos.
En el mismo aceite donde hemos hecho las cebolletas, añadiremos las setas, y las saltearemos durante seis minutos. Seguidamente, añadiremos la cebolletas nuevamente, y salpimentaremos el conjunto.
Una vez listo todo, ensartaremos la carne de las brochetas troceada, y las haremos a la plancha durante tres o cuatro minutos por cada lado, hasta que la carne nos quede doradita. Finalmente, serviremos las brochetas en platos individuales, y las acompañaremos con las setas y las cebolletas, antes de servirlas a la mesa.